Alejandro San Francisco: “El proyecto de nueva Constitución chilena se aleja de las democracias occidentales”
Alejandro San Francisco habló sobre el creciente rechazo a la Constituyente chilena, el análisis de los temas polémicos aprobados y la evaluación de la caída en el apoyo del presidente Boric en los primeros dos meses de su mandato.
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San Francisco es historiador, profesor de la Universidad de San Sebastián y de la Pontificia Universidad Católica de Chile, y director de formación del Instituto Res Publica.
“El plazo de la Convención Constitucional es de 12 meses y termina en julio. Ahora está en su fase final. El 17 de mayo termina el trabajo del pleno y tras eso viene una etapa de ajustar y fijar artículos transitorios. Al final habrá un plebiscito de salida, el 4 de septiembre. El proceso está avanzado, con más de 300 artículos aprobados a contrarreloj. No debiera quedar mucho por resolver”, señaló.
El analista dijo que este proceso constituyente “ha sido el más novedoso en la historia de Chile, por cómo se gestó y se canalizó. En el contenido, hay varias normas que han generado preocupación en la ciudadanía. Una de carácter conceptual, porque Chile comienza a definirse como un Estado plurinacional. También se eliminó el Senado, institución que fue parte del Poder Legislativo desde los inicios de la república, que es reemplazado por una asamblea de las regiones. Hay un cambio de paradigma, un corte con la tradición constitucional chilena. Se habla de una democracia paritaria, con más de 100 menciones a los pueblos originarios, con derechos incluso territoriales”.
“Hay una redefinición de la democracia, que se aleja en alguna medida de lo que son las democracias occidentales. Se tiende a configurar una fórmula más indigenista o bolivariana. Habrán escaños reservados para los pueblos indígenas en algunos órganos colegiados de representación popular, alterando mayorías y minorías. Frente a esto surgieron observaciones, planteadas no sólo por la centroderecha, sino también desde la antigua Concertacion”, precisó.
En cuanto al apoyo ciudadano a la Convención, recordó que “cuando se instaló tenía un amplio respaldo del 60 al 65%. Desde febrero y marzo a la fecha, el apruebo ha ido bajando y el rechazo va subiendo. Todavía hay muchos indecisos y es un resultado abierto”.
“Si triunfa el rechazo se abren varias alternativas: restaurar la Constitución del 2005 y no hacer ningún cambio, reflotar el proyecto de reforma de la presidenta Bachelet, que el Congreso Nacional actúe como órgano constituyente, que se convoque a una nueva Asamblea Constituyente o que un congreso de expertos redacte una nueva Constitución”, indicó.
San Francisco también se refirió a la pérdida de popularidad de Gabriel Boric, “el presidente que ha perdido más apoyo desde el regreso de la democracia en el primer y segundo mes de gobierno. Tiene más del doble de rechazo que de aprobación, por varias razones: los equipos de gobierno no han funcionado bien, particularmente el Ministerio del Interior; se ha enfrentado a la dura realidad del poder; hay delincuencia e incluso terrorismo en la Araucanía; y tenemos la inflación más alta en los últimos 30 años”.
“La aprobación del presidente y de la Convención son directamente proporcionales. Si el gobierno del Frente Amplio y el Partido Comunista no repunta, los costos también los pagará la Convención”, añadió.