Biotecnología: oportunidades y desafíos para el desarrollo – Cecilia González
La biotecnología no se limita únicamente a los transgénicos, aunque este es uno de sus aspectos más conocidos. González explicó que la biotecnología abarca la transformación y aprovechamiento de procesos realizados por microorganismos.
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En un nuevo episodio del espacio digital “De Frente con Oscar Ortiz”, conversamos con Cecilia González, biotecnóloga ambiental de la Universidad Autónoma de Guadalajara y con especialización en gestión de la biodiversidad en Alemania, además de una maestría en biología y sociedad en la Universidad Estatal de Arizona. Cecilia González nos ofreció una visión profunda sobre la relación entre tecnología y desarrollo moderno en las naciones.
La biotecnología no se limita únicamente a los transgénicos, aunque este es uno de sus aspectos más conocidos. González explicó que la biotecnología abarca la transformación y aprovechamiento de procesos realizados por microorganismos. Un ejemplo cotidiano es el uso de detergentes en polvo, que contienen enzimas obtenidas a través de biotecnología. Otro ejemplo relevante es el desarrollo de vacunas, como la del COVID-19, que fue posible gracias a tres décadas de investigación biotecnológica. La biotecnología también se aplica en la producción de tintas derivadas del maíz transgénico y en la industria textil, como en la creación de jeans desgastados.
Impacto Económico y Ambiental de la Biotecnología
González destacó la importancia de la biotecnología para cada país, ya que permite desarrollar industrias más limpias, una agricultura más eficiente y menos contaminante, y alimentos más saludables. La biotecnología puede ser una herramienta clave para mejorar la economía de un país, especialmente en tiempos de crisis. En América Latina, países como Argentina, Brasil y Paraguay han demostrado ser líderes en el uso de biotecnología para la producción alimentaria, logrando posicionarse como grandes productores mundiales de alimentos. Argentina, por ejemplo, ha desarrollado bioinsumos como el inoculante bacteriano que mejora el rendimiento de las semillas.
En Brasil, la biotecnología ha llevado al desarrollo de una caña de azúcar genéticamente mejorada y tolerante a la sequía, además de mejoras en el manejo de animales de granja y el desarrollo de vacunas. Estos avances han permitido a estos países recuperarse económicamente tras la pandemia, continuando con la exportación y el ingreso de divisas.
Desafíos y Oportunidades para Bolivia
Bolivia enfrenta desafíos significativos para integrar la biotecnología en su desarrollo agrícola y económico. Según González, el país carece de una política clara y definida en temas de biotecnología y política agropecuaria. A pesar de los anuncios de construir plantas de bioinsumos, la realidad es que se necesita un enfoque más técnico y personal calificado. La normativa debe ser clara y específica para garantizar la calidad y efectividad de los biofertilizantes y bioestimulantes.
Bolivia tiene la oportunidad de aprender de las experiencias de países vecinos como Colombia, que ha desarrollado bioinsumos exitosos utilizando microorganismos nativos, lo cual resulta más efectivo. Sin embargo, Bolivia aún debe superar la falta de coordinación entre instituciones de investigación, el sector privado y el Estado.
Hacia una Política Nacional de Biotecnología
Para que Bolivia pueda aprovechar plenamente la biotecnología, es necesario establecer un marco normativo actualizado y una política clara que defina prioridades y objetivos. González sugirió la creación de un comité nacional de científicos que asesore en estos temas, además de una mayor inversión en investigación y desarrollo. La colaboración entre universidades, sector privado y el Estado es esencial para identificar necesidades y avanzar en soluciones tecnológicas.
Innovación en Altura: Orquídea Andina
González también compartió su proyecto personal, Orquídea Andina, una startup que busca producir alimentos en el altiplano a más de 3500 metros de altura utilizando alta tecnología. La iniciativa pretende mejorar la calidad de vida de los productores locales y generar productos alimentarios nutritivos y con valor añadido, orientados tanto al mercado nacional como internacional.
La biotecnología ofrece un vasto campo de posibilidades para el desarrollo sostenible y económico de las naciones. Bolivia tiene la oportunidad de integrarse en este campo, pero necesita un enfoque estratégico y colaborativo para superar los desafíos actuales y aprovechar al máximo su potencial.
