Escucha la noticia
… si no era para levantar el nombre de Arce Catacora , a ver si superaba ese 13/14 % y bajando, que lo tiene preocupado, pasa “raspando”, porque al día siguiente de las detenciones de los “golpistas”, apareció en las RRSS un spot (parece que solo ahí) que resalta que: en momento de crisis, la “valentía y el coraje”… de los verdaderos líderes y… equiparándolo al hermano Lucho con el ex presidente chileno, Salvador Allende. El “reel” (así se llama ahora un video corto), comienza con las comparaciones entre Arce y Evo Morales; entre los ministros del uno y el otro… dando todas las ventajas, por supuesto al “Salvador” de Bolivia.
El “reel” de alabanzas al presidente Arce, olvida a propósito un pequeño gran detalle: el actual presidente también se asiló en la embajada de México y, para lograr su salida del país, “resucitó” su pasada grave enfermedad, hecho que muestra que él también es parte de los huidos, aunque no uno de privilegio como Evo Morales. Flaco favor se le hace a don Arce, que no quiere “beneficiarse con el “golpe que no parece haber sido”.
El jueves pasado (27 junio) el presidente Arce se “talló” dando ate y desate a los periodistas de lo ocurrido, como si se tratara de contar anécdotas en la que, otra vez, él es quien resalta como el protagonista valiente, porque interpeló a Zúñiga, en una vergonzosa actuación, dado que cuando le mostraba el “bastón de mando” que lo presentaba como el “capitán general de las FFAA” y le reclamaba que le haga caso, el “levantisco” General, compañero del grupo de básquet semanal del hermano Lucho le respondió que no le iba a hacer caso… ese es un papelón que muestra al pobre presidente como un sargento discutiendo con otro sargento…. Aunque el sargento embastonado (Pdte Arce), estaba apoyado por la furibunda ministra Prada que vociferaba frente a los teléfonos y seguramente alguna cámara que estaban grabando el penoso hecho que, si no fiera por una segunda intención, no debían ser públicos, pero lo fueron; todo esto, mientras el vicepresidente pedía silencio, tratando de darle alguna seguridad a las cámaras para que lo capten todo; hecho que muestra cuán solo y desprotegido está el presidente; pero, pasemos a detallar los hechos que demuestran lo mal que se hicieron todas las cosas.
Esto seguramente tenía el objetivo de mostrar la contundencia del presidente y lo que logró fue la risa del país cuando se escuchó decir al “rebelde basquetbolista de apellido Zúñiga” que no le iba a hacer caso… ¿era necesario transmitir algo que debió ser una especie de secreto de Estado, si acaso no fuera una “puesta en escena”?
Por otra parte, si la Casa Militar, es decir la seguridad del presidente Arce, tuviera a alguien que entienda medianamente de seguridad y protocolos de protección de personalidades, sabrían que el presidente es, en estos casos, el “más preciado símbolo de la democracia” y que no debe estar en las que estuvo don Luis, acompañado, además, por el “jilata”… es decir que el presidente ni el vicepresidente pueden estar en el escenario cercano de conflicto; así sea para dar la impresión que las cosas se hacían con conocimiento básico de la obligación de preservar al presidente; no importa si ¨su coraje” lo lleva a primera fila, porque, nos agrade o no, él representa el poder democrático y, debe someterse a la regla…. De manera que… si no adoptó los procedimientos de seguridad en cuidado de mandatarios y altas personalidades, lo más posible es que tal “situación de peligro no existió”; al punto tal que… ordenó al insurrecto que se retire” y no ordenó su apresamiento, dándole la chance de irse, es decir, hasta ahí todo fue una puesta en escena, penosa para la autoridad presidencial, por otro lado.
Por otra parte, ¿es posible creer que en el gobierno en su conjunto no haya tenido información de qué pasaba en las FFAA, porque no le pasaban informes al ministro Novillo?. Esto lo dijo suelto de cuerpo don Luis Arce ante la prensa nacional e internacional que asistió a la conferencia de prensa para escuchar su anecdotario personal, donde trataba de mantenerse en el centro de la escena. Eso, desde mi particular punto de vista obedece a la necesidad de convencer al país de que por eso salió Zúñiga a hacer lo que quiso… pero, en los hechos, estuvimos viendo al presidente decir que los ministros Novillo y del Castillo no deben seguir en sus cargos porque representan un peligro para la seguridad del Estado, porque lo dicho es absurdo; eso no existe en materia de seguridad del Estado, pero la intención de hacer creer que “hubo golpe”, es menos importante que la seguridad del Estado.
Lo dicho fue como querer convencernos de que, si no fuera por los paraguayos, nunca hubiéramos sabido de Marset (que hacía derroche de plata y poder por todos lados) y, que, si no dicen nada los brasileños, no nos enteraríamos de la cantidad de “comandos vermelhos” y PCC que están por acá y, porqué se envían cargamentos más grandes de cocaína, la lógica fuera creer que en el poder “ni se enteran”, porque eso es pensar que nos chupamos el dedo y no sabemos, aunque no nos conste, que se paga mucho dinero en este país para lograr impunidad.
Arce ha dado a entender que este es un país sin seguridad interna y lo hace para “liberarse” de lo que no ha logrado hasta ahora: que no se vea este tema como un arreglo entre el poder y Zúñiga para que parezca lo que nunca ocurrió.
Su anecdotario fue una vergüenza para el país y, lo peor es que nada encaja; en el Video publicado por Ministerio de la presidencia, muestran unas multitudes que no fueron tales porque cuando se dispararon los gases, en la plaza Murillo no había esa cantidad de gente; los medios lo reflejaban… sin embargo muestran un “moroco” (pantorilla) herido por un balín y no hay o hubo una sola imagen de enfrentamientos entre “la CSUTCB” y los “sublevados”. ¿Es posible dar crédito a lago que no se registró en las cámaras de la gente que tiene teléfono celular? ¿Por favor, sólo en La Paz puede ocurrir eso de que no haya grabación de lo ocurrido?
Y, con las disculpas del caso… señor presidente, lo interpelo para que me haga el favor de responder ¿cómo es posible que en la plaza Murillo, donde es prohibido entrar la mayor parte del tiempo, “justo ese día”? Creo que corresponde que se explique por qué todo fue liberado al libre tránsito y que no haya un solo policía en el Congreso o parlamento y que, escuchándose las sirenas de las tanquetas, no haya salido la gente de la seccional policial que está a una cuadra de la plaza, como también que se aclare porqué motivo los Colorados de Bolivia, es decir el Regimiento Escolta encargado de la seguridad del presidente, no haya salido a evitar y repeler las barbaridades hechas por Zúñiga: ¿ tendremos que creer que el jefe de la Casa Militar también estaba en la lista de convocados por el “rebelde” que se hace llamar el General del Pueblo? (elay, otro René Barrientos, dijo una viejita).
Otro, para ir cerrando: en el país hay casi 40.000 policías y no hubo policías que tomen las calles de las principales ciudades, como correspondía, si ustedes ya sabían de que se “gestaba un golpe de Estado”; porqué no lo hicieron? Tampoco sacaron militares leales a la CPE; ¿por qué motivo? Porque no había golpe y, más bien, pensemos que estábamos frente a una inmolación del Gral. Zúñiga (aun no dado de baja del Ejército, como correspondía); lo más seguro es que se esperaba nomás mejorar la imagen presidencial, es decir, todo pudo haber sido una puesta en escena que nadie cree, o muy pocos lo hacen.
A su anecdotario le faltan detalles que son claves, don Luis Alberto Arce Catacora, en correcto censo, usted ha puesto en entredicho y en duda la institucionalidad del Estado, institucionalidad a la que está obligado a preservar, como primer servidor público y el daño causado puede ser irreversible; la ciudadanía no cree esto, pero como ustedes ya avanzaron mucho como para dar marcha atrás, esto va a quedar como que fue:
Mal contado el cuento del presidente nigüento, que se quedó con las nigüas y nadie se quedó contento.