Los gobiernos del MAS y la falta de estado en Bolivia – Manuel Suárez
Desde sus inicios, Bolivia ha enfrentado enormes retos para consolidarse como un estado moderno. Según Manuel Suárez, doctor en ciencias políticas, esta dificultad no es única en el país, sino compartida con otras naciones de América Latina.
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Desde sus inicios, Bolivia ha enfrentado enormes retos para consolidarse como un estado moderno. Según Manuel Suárez, doctor en ciencias políticas, esta dificultad no es única en el país, sino compartida con otras naciones de América Latina. Sin embargo, en el caso boliviano, esta falta de consolidación ha sido particularmente marcada. Suárez argumenta que, históricamente, el Estado boliviano ha estado ausente en varios aspectos fundamentales, dando lugar a estructuras de poder fragmentadas, donde el mando no responde a la ley, sino a figuras como caudillos, sindicatos o grupos de interés.
El Estado moderno, explica Suárez, se caracteriza por el monopolio de la ley, donde ninguna fuerza política, social o militar puede estar por encima de ella. En Bolivia, esta centralidad de la ley ha sido constantemente desafiada, impidiendo la construcción de un Estado pleno.
El MAS y la Promesa Incumplida del Estado Plurinacional
El Movimiento al Socialismo (MAS) llegó al poder prometiendo la construcción de un Estado plurinacional, un concepto innovador que pretendía integrar las diversas identidades y culturas del país. Sin embargo, después de 20 años, Suárez sostiene que en lugar de consolidar el Estado, el MAS ha implementado una estrategia que privilegia el mando caudillista y partidario, en detrimento de la institucionalidad.
Esta estrategia, asegura Suárez, no es única del MAS. Históricamente, Bolivia ha visto el predominio del poder personalista antes que el de la ley. No obstante, lo que diferencia al MAS es su enfoque en utilizar esta fragmentación del mando para mantener el control político, profundizando la polarización en el país.
Nacionalismo y Caudillismo: Obstáculos para la Modernización
El análisis de Suárez conecta la construcción del Estado con dos grandes paradigmas históricos: la República y el Nacionalismo. Si bien la vida republicana se propuso como un marco para organizar la sociedad con base en la libertad, la ley y la voluntad popular, esta fue capturada por élites económicas y políticas, lo que llevó a su fracaso inicial.
Posteriormente, la Revolución de 1952 marcó un intento de construir el Estado desde el nacionalismo, colocando al “pueblo” en el centro del poder. Sin embargo, este modelo también fracasó en consolidar el mando de la ley. El MAS, según Suárez, ha perpetuado este fracaso, utilizando el nacionalismo para dividir al país y fortalecer su control, especialmente a través de la construcción de un “enemigo interno”, representado por Santa Cruz.
La Leyenda Negra de Santa Cruz: Estrategia de Polarización
En su ensayo, Suárez describe cómo el MAS ha construido una narrativa en la que Santa Cruz es el antagonista de la nación. Desde acusaciones de separatismo y terrorismo hasta ecocidio, esta “leyenda negra” ha sido fundamental para consolidar el poder partidario del MAS, mientras debilita la cohesión nacional.
Santa Cruz, sin embargo, también representa un modelo exitoso de modernización económica y social dentro de Bolivia. Suárez argumenta que la visión cruceña, basada en valores burgueses y capitalistas, desafía directamente el modelo nacionalista del MAS. Este contraste ha alimentado la polarización, dificultando aún más la construcción de un Estado inclusivo.
Retorno a los Valores Republicanos: Una Alternativa para Bolivia
Frente a la profunda polarización y el debilitamiento institucional, Suárez aboga por un retorno a los valores republicanos como la solución para Bolivia. Este modelo implicaría un pacto nacional basado en la democracia, la libertad y la ley, dejando atrás el caudillismo y las narrativas divisivas.
La crisis del MAS, señala Suárez, puede ser una oportunidad para abrir una nueva página en la historia del país. Sin embargo, este proceso requerirá un esfuerzo sostenido por parte de todos los actores sociales y políticos para superar las heridas de las últimas décadas y construir una visión compartida de nación.
A medida que Bolivia se aproxima a su bicentenario, las reflexiones de Manuel Suárez invitan a un debate profundo sobre el camino a seguir. La falta de un Estado consolidado, el impacto del caudillismo y las tensiones regionales son desafíos que no pueden ser ignorados. En palabras de Suárez, la salida radica en construir un pacto republicano que permita superar la polarización y avanzar hacia una sociedad más cohesionada y equitativa.
Para leer más sobre este análisis, se puede consultar el ensayo completo de Manuel Suárez, El impacto novel del MAS y la construcción del Estado boliviano, disponible en la página de la Fundación Democracia y Prosperidad.
➡️ https://fundep.org.bo/ideas-debate/ideas-debate-no-15/
