Consuelo Rivero se defiende de acusaciones de estafa en Perú y denuncia que fue secuestrada
La denominada "estafadora de Tinder" fue entrevistada anoche en la Red Uno.
Escucha la noticia
Consuelo Estrella Rivero Hoyos, conocida como la “estafadora de Tinder” en Perú, se encuentra en Santa Cruz y anoche habló en exclusiva con el programa Que No Me Pierda de la Red Uno. En la entrevista negó haber estafado a empresarios peruanos.
Consuelo Rivero aprovechó para pedir garantías para su familia y aseguró que no habló con anterioridad porque no tenía ningún tipo de notificación por denuncias en su contra. “Tengo miedo que le pueda pasar algo a mi familia y si esto ocurre hago responsable a Julio Chirinos”, declaró la denunciada.
Chirinos es uno de los empresarios que acusó a Consuelo Rivero de haberlo estafado con 100.000 dólares para la compra de un lote en Santa Cruz. Ella negó esta acusación y dijo que todo fue planeado por el peruano para desvirtuar las denuncias que interpuso en Perú.
Consuelo Rivero acusó a su expareja peruana de haberla retenido en su vivienda el 11 y 12 de agosto y, de obligarla, bajo amenazas, a grabar un video donde dice haber estado detenida en Bolivia. “No fue voluntaria ni esa declaración, ni el documento que me hace firmar aceptando un resarcimiento civil por 100 mil dólares”.
La mujer presentó una denuncia por secuestro en contra de su expareja y aseguró que en la noche que estuvo retenida, intentó asfixiarla y extorsionó a sus familiares y amigos con 50.000 dólares para que pueda ser liberada.
“Nosotros ya tenemos una carpeta fiscal (en Perú), tengo que declarar el 15 de septiembre de forma virtual y él lo hará el 16”, dijo Consuelo Rivero a tiempo de informar que los delitos por los que denunció a Chirinos son secuestro, falsificación de documentos y violencia psicológica.
Recalcó que las denuncias de estafa que Julio Chirinos dio a conocer no tienen sustento y reveló que lo conoció por Facebook, luego de que éste la invitara a unos cursos de marketing.
“Durante nuestra relación, él me regaló 8 mil dólares para la (cuota) inicial de mi camioneta, nada más (…) él se está encargado de denigrarme, de hacer que mi credibilidad sea nula, para desvirtuar las denuncias en su contra”, dijo y añadió que su expareja debe más de 100.000 soles a un banco de Perú.
“Es él quien ha quedado debiéndome a mí, porque le presté mi tarjeta de crédito para que pueda pagar las pautas publicitarias en su empresa de marketing”, agregó.
Indicó que Chirinos solo le dio 4.500 dólares para la cuota inicial de un terreno y departamento ubicados en la zona norte de la capital cruceña. “Teníamos un proyecto de vida en común y ahora me he quedado con la deuda del terreno y la tarjeta”; dijo que ella intentó arreglar con Chirinos con respecto a esta adquisición, sin embargo, este se negó.
Denunció que está siendo víctima de amedrentamiento por parte de Chirinos, pues estaría vigilando su vivienda. “Yo no lo he estafado al señor, he sido víctima de una relación tormentosa y le tengo miedo porque mandó una fotografía de afuera de mi domicilio”, agregó.
Consuelo Rivero confirmó el préstamo que recibió Lidya Aguado, ciudadana peruana que también la denunció por estafa; sin embargo, aseguró que a raíz de un acuerdo de separación con su primer esposo este garantizó que iba asumir el pago de esa deuda.
Aguado acusó a la boliviana de haberla estafado con 15 mil dólares para un negocio de maquinaria pesada.
Sobre su condición de abogada, Consuelo Rivero afirmó que estudió Derecho en la Universidad Gabriel René Moreno de Santa Cruz, obteniendo su licenciatura en 2012. Dijo que estos documentos aún no fueron validados en Perú, por lo que trabajaba como asesora externa,
Consuelo presentó los títulos obtenidos en la Universidad pública en 2012.
Consultada sobre los antecedentes penales que tuvo en Bolivia, la mujer evitó hablar, “Hay cosas que voy a evitar responder y que prefiero mantenerlas al margen porque quiero tener documentación en mano para poder hablar”.
Ratificó su pedido de garantía tanto para ella como a sus dos hijas, ya que aseguró que recibe constantes amenazas por parte del empresario Chirinos, inclusive desde otros números de celular. “Él a mi me secuestró, me golpeó e intentó asfixiarme (…) tengo dos hijitas que tienen miedo y yo tengo miedo de volver al Perú”. agregó en la entrevista televisiva.