Dos casos de graves agresiones a periodistas de Santa Cruz en el conflicto del Censo
Fernando Ruiz de Gigavisión y Mario Rocabado de Unitel son las víctimas.
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En los 13 días de paro indefinido por el Censo en 2023 en Santa Cruz, los periodistas que realizan la cobertura de los hechos que se producen alrededor de la medida han sufrido agresiones físicas, insultos y amedrentamiento. El sábado 22 octubre y el martes 1 de noviembre ocurrieron los casos más graves con Fernando Ruiz de la red Gigavisión y Mario Rocababo de la red Unitel como víctimas de violentos ataques.
El primer día de paro indefinido, una turba de masistas violentos agredieron a vecinos y al equipo de prensa de la red Gigavisión golpeando a la periodista Gabriela Linares en la espalda y fracturando la nariz del camarógrafo Fernando Ruiz, quien fue evaluado por un médico forense que certificó 15 días de impedimento. Su cámara fue destruida en el ataque.
David Elías Ocampo Mamani, funcionario de Vías Bolivia en Santa Cruz, fue plenamente identificado como el agresor del comunicador de la red televisiva, según confirmó el director de la fuerza anticrimen, Julio César Cossío. El Ministerio Público anunció el inicio de una investigación del caso y la búsqueda del agresor, pero hasta la fecha no se conoce de la aprehensión de David Elías Ocampo Mamani.
En el caso del periodista Mario Rocabado de la red Unitel, el Ministerio Público abrió una investigación de oficio para dar con los responsables del violento ataque del martes en la noche en el municipio de La Guardia contra el reportero y el camarógrafo Enrique Sánchez.
La fiscal que lleva adelante el caso, Ilssen Nava, confirmó la apertura de la investigación “contra presuntos autores” e indicó que la comisión de delitos por el cual se investiga son: lesiones graves y leves, además de robo agravado. Mario Rocabado fue evaluado por un forense que estableció 35 días de impedimento por los golpes que recibió en la cabeza, el rostro y otras partes de su organismo.
Rocabado y Sánchez realizaban la cobertura informativa sobre los hechos de violencia en La Guardia cuando fueron atacados por personas “que llegaron junto a la Policía”, según el testimonio del periodista. El camarógrafo tuvo la suerte de ponerse a buen recaudo, situación que no ocurrió con el periodista que estuvo a punto de ser linchado.
En ambos casos aún no existen aprehendidos y menos imputados por las agresiones a trabajadores de la prensa, mientras la Asociación de Periodistas de Santa Cruz y la Asociación Nacional de la Prensa exigieron que los responsables sean individualizados y sometidos a los administradores de justicia en Santa Cruz.