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¿Está avanzando la autocracia más que la democracia?

Russell Cui señala que el declive de la democracia a nivel mundial durante la última década ha borrado en gran medida 35 años de mejora.

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Por Russell Cui1

El precio de la Libertad es la vigilancia eterna.
Thomas Jefferson

Aunque estamos viendo el progreso humano en muchos indicadores de bienestar, en la dimensión de la libertad y la democracia, la tendencia es menos clara en las últimas décadas. Los informes del Instituto Variedades de la Democracia (V-Dem) muestran tres tendencias principales en relación con el declive de los niveles globales de democracia.

En primer lugar, el nivel global de democracia, medido por un nivel medio ponderado por la población de los Índices de Democracia Liberal del V-Dem, ha ido disminuyendo constantemente desde la década de 2010. En 2022, el nivel de democracia del que disfruta el ciudadano medio mundial se habrá deteriorado hasta alcanzar los niveles de 1986. En la región Asia-Pacífico, el nivel de democracia retrocedió a niveles registrados por última vez en 1978.

Aunque todavía podemos decir que ha habido un progreso global en democracia en comparación con principios de la década de 1970, cuando comenzó la “tercera ola de democratización“, el declive de la democracia en la última década borró en gran medida los 35 años de mejora.

En segundo lugar, el número de países que pasaron de la democracia a la autocracia (los “autocratizadores”) en la última década es mucho mayor que el número de países que pasaron de la autocracia a la democracia (los “democratizadores”). En 2022, hubo un número récord de 42 autocratizadores, que contenían el 43% de la población mundial. En comparación, el número de países democratizadores fue de 14, con sólo el 2% de la población mundial. Se trata de una cifra récord que se registró por última vez en 1973, hace 50 años.

En tercer lugar, el equilibrio de poder mundial también se ha inclinado significativamente a favor de las autocracias. En concreto, las autocracias representaban el 46% del PIB mundial (en paridad de poder adquisitivo) en 2022, frente al 24% en 1992. El comercio entre democracias representaba el 47% del comercio mundial en 2022, frente al 74% en 1998, y cada vez es mayor la proporción del comercio mundial que tiene lugar con y entre autocracias. La dependencia comercial de las democracias respecto de las autocracias pasó del 21% del comercio mundial en 1999 al 35% en 2022. La proporción del comercio entre autocracias se triplicó, pasando del 6% del comercio mundial en 1992 a casi el 18% en 2022.

El ascenso de China ha desempeñado un papel fundamental en el cambio del equilibrio del poder económico y comercial. En términos de paridad de poder adquisitivo, el PIB de China superó al de Estados Unidos en torno al año 2014, convirtiendo a una autocracia cerrada en la mayor economía del mundo. Como porcentaje del PIB mundial, China pasó del 4,4% en 1992 al 18,5% en 2022. China también es responsable de una parte significativa de los cambios en los patrones comerciales, ya que su cuota en el comercio mundial alcanza casi el 15% y es un socio comercial importante para muchas autocracias y democracias.

Los politólogos han argumentado que la influencia de las grandes potencias en la estructura del sistema internacional es importante para afectar a las trayectorias de las democracias y los regímenes autoritarios. Las implicaciones del ascenso de China para el destino de la democracia son todavía una historia en desarrollo.

En general, estas tendencias son alarmantes y merecen más atención por parte de las personas que se preocupan por la democracia y el progreso humano. El progreso de la libertad política es fundamental para el progreso humano en otros ámbitos. Por lo tanto, es posible que el progreso humano en general se enfrente a un declive si continúa la tendencia a la autocratización.

Aunque la tendencia general del progreso humano en el ámbito de la libertad política sigue prevaleciendo –si la observamos desde un horizonte temporal de más de 40 años–, también debemos reconocer que el progreso de la libertad nunca está garantizado. La libertad es “frágil” y debe ser, como señaló el Presidente Reagan, “luchada y defendida constantemente por cada generación”.


1Russell Cui posee un máster en Ciencias Políticas por la Universidad de Rochester, un máster en Economía por la Universidad Estatal de Arizona y una licenciatura en Matemáticas y Economía por la Universidad Washington de St. Louis. Ha realizado prácticas en el Center for Monetary & Financial Alternatives del Cato Institute y en HumanProgress.org.

*Este artículo fue publicado en elcato.org el 03 de enero de 2024

*La opinión expresada en este artículo es responsabilidad exclusiva del autor y no representa necesariamente la posición oficial de Publico.bo


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