Abogada: “Es un grito de auxilio”; Aguilera: “Lo hizo por llamar la atención”
Activistas y ciudadanos realizan vigilia en las inmediaciones del penal de Miraflores de La Paz.
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El intento de suicidio de la expresidenta Jeanine Áñez en el penal de Miraflores de La Paz, este sábado en la mañana, fue interpretado por su abogada Norka Cuéllar como un “grito de auxilio” de la exmandataria ante los permanentes abusos que soporta en su encierro preventivo, mientras que el comandante de la Policía, coronel Johnny Aguilera, sostuvo que “lo hizo para llamar la atención”.
Después de ver a la expresidenta en el recinto penitenciario, entre sollozos, la abogada Cuéllar dijo a los medios que los cortes que Áñez se hizo en la muñeca y antebrazo izquierdo son “un grito de auxilio” y, aprovechando la gran cantidad de cámaras y grabadoras de los medios de comunicación, Cuéllar se dirigió al presidente Luis Arce y al jefe del MAS, Evo Morales.
“Señor Arce, el gobierno de Jeanine Áñez le concedió a usted un salvoconducto para que salga del pais por razones humanitarias y señor Evo Morales la oposición le concedió a usted, por razones humanitarias, el auxilio para que un avión lo traslade hasta México, para que su vida no corra peligro, les suplicamos, como defensa de la señora Áñez, que hagan lo mismo con ella”, exclamó con la voz quebrada.
Por su parte, Aguilera intentó minimizar lo ocurrido con la expresidenta Áñez y dijo a los periodistas de manera textual: “Ella está estable, no tiene ninguna lesión que resulte de consideración. Nosotros entendemos que lo hizo para llamar la atención. Ella no brinda ningún tipo de información acerca de en qué circunstancias se hubiera generado esto”.
El comandante de la Policía, quien aguarda ser ascendido a general en los próximos días, explicó que la expresidenta Añez no fue trasladada a un centro de salud por las lesiones auto infringidas, sino que fue atendida por el personal médico del penal de Miraflores.
Áñez fue detenida en marzo de este año en Trinidad por el inventado caso de supuesto “golpe de Estado”, denunciado por el gobierno de Arce. El operativo de detención estuvo encabezado por el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y el actual comandante de la Policía, quienes escoltaron a la exmandataria para que inicialmente sea aprehendida en celdas de la Fuerza de Lucha Contra el Crimen y luego encarcelada, primero en el penal de Obrajes y luego en la cárcel de mujeres Miraflores.