Gobierno le cierra el grifo de 52 millones de bolivianos a Morales por aportes de funcionarios públicos
La guerra interna en el masismo también llega al campo económico.
Escucha la noticia
Por Raúl Peñaranda de Brújula Digital
El vicepresidente del MAS, Gerardo García, informó que el Gobierno ordenó cortar los aportes que los funcionarios públicos realizaban a ese partido. El hecho implica que Evo Morales, que es jefe nacional del MAS y controla las finanzas de ese partido, pierda acceso a por lo menos 51,9 millones de bolivianos anuales, según una estimación de Brújula Digital.
Esta es una reacción del presidente Luis Arce ante los ataques incesantes y cada vez más serios de Morales y otros voceros de su facción contra el gobierno.
El artículo 72 del estatuto del MAS dispone que los militantes de ese partido que sean servidores públicos, trabajadores en instituciones públicas, autoridades electas y designadas deben aportar al MAS, de forma regular, los siguientes montos: el 1% de su sueldo quienes ganan hasta 10.000 bolivianos; el 2% quienes perciban entre 10.001 y 20.000 bolivianos; y el 3% quienes ganen más de 20.001 bolivianos.
Esos montos son pagados no solo por los militantes masistas sino por la totalidad de los funcionarios públicos, dijo una alta fuente del gobierno a Brújula Digital. Quienes no lo hacen son despedidos de inmediato, expresaron funcionarios a este portal de noticias.
Los montos totales de aportes de los funcionarios de la administración central y de las empresas estatales arroja por lo menos la cifra de 51,9 millones de bolivianos al año, que son administrados por Morales y otros integrantes del “sector evista” del partido. Este monto se basa en datos de 2017 (últimos datos disponibles de cantidad de funcionarios públicos entregados por el gobierno) que con seguridad han aumentado en estos últimos cinco años.
Esa cifra tampoco toma en cuenta los funcionarios de la Asamblea Legislativa Plurinacional, que aportan esos mismos porcentajes, ni de las alcaldías y gobernaciones que responden al MAS y que según la estimación de la fuente del gobierno consultada representa unos 10 millones de bolivianos adicionales.
En la administración departamental y regional trabajan 10.222 funcionarios y en la administración municipal e indígena-originario-campesina, otros 26.077, haciendo un total de 36.299 personas, de las cuales aproximadamente un 50% depende de alcaldías o gobernaciones controladas por el MAS. Ellos también aportan al partido, pero con porcentajes diferentes según cada caso.
Morales controla los cargos principales del MAS, como los que se encargan de las finanzas y del relacionamiento con el Tribunal Supremo Electoral.
El monto de 51,9 millones de bolivianos surge del siguiente cálculo: en la administración central y empresas estatales trabajaban en 2017 un total de 46.330 personas (se excluyen maestros, policías, militares, etc.) según el informe “12 años de estabilidad económica en Bolivia”, publicado por el Ministerio de Economía en 2018. No existen reportes posteriores.
De esas 46.330 personas, la fuente informó que un 83% gana menos de 10.000 bolivianos (38.453 funcionarios) y tienen un salario medio de 5.000. El 1% de ese monto implica 1,9 millones de bolivianos al mes, es decir 24 millones al año (incluido un aguinaldo).
Por otro lado, un porcentaje de 16% gana entre 10.001 y 20.000 bolivianos (7.415 funcionarios), con una media de 12.000 bolivianos. Un 2% de aporte de ese monto equivale a 1,8 millones al mes (23,1 millones al año, con un aguinaldo).
Finalmente, quienes ganan más de 20.000 bolivianos son el 1% de los funcionarios, es decir 463 personas. Su 3% de aporte equivale a 291.000 bolivianos al mes (3,8 millones al año, con 13 sueldos).
Estos montos son de libre disponibilidad para el partido y han sido usados para todo tipo de acciones, además de ser administrados libremente por Morales y su entorno. Como son montos privados, nadie ha dado cuentas sobre ellos ni tampoco entidades como la Contraloría se han involucrado en su investigación. Esos dineros, por su carácter reservado, tampoco pagan impuestos. Esto ha venido ocurriendo prácticamente desde el inicio del gobierno del MAS, es decir que las cifras obtenidas son gigantescas.
Morales dijo en una declaración a la radio Kawsachun Coca en agosto pasado que la cuenta bancaria oficial del MAS tiene nueve millones de bolivianos, una cifra muy por debajo de los 51,9 millones anuales de la presente estimación.
Otro cálculo, con cifras de masa salarial
El economista y especialista en finanzas públicas Julio Linares señaló que con cifras actualizadas a 2022, los montos que administra Morales son mucho más altos. Hizo notar que la masa salarial de la administración central, además de las empresas estatales y descentralizadas, alcanzará el año 2022 a 7.278 millones de bolivianos, según datos oficiales del SIGEP. El 1,5% de aporte en promedio de los servidores públicos es en ese caso de 109 millones de bolivianos anuales.
Precisamente para eliminar esa enorme fuente de financiamiento a la facción contraria a la suya es que el presidente Arce ha decidido cortar esos aportes, dijo la fuente consultada.
Gerardo García, el vicepresidente del MAS, confirmó que el partido ya no tiene esos recursos: “Al menos, hasta ahora, nos han hecho conocer y los aportes ya no existen. Entonces, debe ser, seguramente, instrucción de arriba, porque las bases, algunos nos han informado que ya han prohibido aportes”, declaró a Página Siete.
Morales y otros voceros del ala “evista” lanzan desde hace meses duras acusaciones y declaraciones contra el presidente Arce y su gobierno. La decisión de cortarle a Morales el financiamiento del partido es una reacción a esos ataques.
García indicó que en una próxima reunión con el Presidente espera conocer las razones que motivaron el corte de los aportes. “Nos reuniremos con el Presidente, Vicepresidente, conoceremos cuál es la determinación, por qué han determinado eso, o son los ministros, no sé, pero ya los aportes han cortado”, expresó.