Somos una sociedad violenta: dos editoriales y un trabajo de reportería muestran los motivos de nuestra crueldad
Página Siete, Correo del Sur y Red UNO analizan e informan sobre el descuartizamiento de Mayerly y Anakin, y el flagelo a una niña.
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Página Siete – Mayerli y Anakin
Más allá de los victimarios de Mayerli en La Paz y Anakin en El Alto, el editorial de este viernes de Página Siete hinca el diente más a fondo y habla de la responsabilidad del Estado y la sociedad. Bajo este razonamiento, la primera parte del texto de opinión está dedicada al feminicidio seguido de descuartizamiento de la muchacha con cierto grado de discapacidad. Se ocupa de Matusalén Mancilla, asesino de 22 años que violó y mató cuando tenía 15, lo que obliga a “revisar a fondo cómo se produce la reinserción de los presos a la sociedad ante la falta de políticas al respecto”.
“Matusalén no se rehabilitó y, en cambio, se volvió más peligroso mientras estaba recluido”, afirma y apunta al Estado. En el caso de Anakin, también desmembrado mientras aún estaba con vida, el editorial interpela a la “sociedad en su conjunto porque un crimen de esa naturaleza muestra que se está registrando un quiebre muy profundo no en una o dos familias, sino colectivamente”. “… parecemos incapaces de acompañar el desarrollo emotivo y mental de los jóvenes y no nos percatamos a tiempo de las señales peligrosas y de violencia que a diario se emiten en la casa, en las aulas o en las calles”, reflexiona.
Página Siete concluye que Mayerli y Anakin son finalmente víctimas “de un Estado que no cumple con sus funciones y de una sociedad que está perdiendo el rumbo en la formación de las nuevas generaciones”. Y cierra su texto de opinión con el siguiente desafío: “La Policía ha cumplido con su rol de esclarecer los crímenes; sin embargo, la idea no es seguir contando asesinatos horrendos, sino, ser capaces de evitarlos para que la lista de víctimas no siga creciendo”.
Correo del Sur – Matar con saña
De entrada el editorial del periódico de la capital del país del miércoles anota que “no es la primera vez que se reportan descuartizamientos en el país; sin embargo, los anteriores fueron hechos aislados, que no dieron pie a otros en mucho tiempo. El escaso lapso entre los dos últimos permite suponer que, pese a no estar relacionados, sí responden a un mismo factor externo: la violencia extrema”. Correo del Sur enfatiza que después de un debate de décadas, “los criminólogos coincidieron, por fin, en que el crimen es contagioso”, es decir que uno de características peculiares puede convertirse en “un mal ejemplo a seguir y ser replicado”.
Rescata una entrevista que realizó Correo del Sur Radio, parte de su plataforma mediática, al único siquiatra que tiene Régimen Penitenciario en el país, Yuri Aguilera, quien trabaja en el penal cruceño de Palmasola y señaló que “de una población de 100 nacidos vivos, alrededor de 5 podrían nacer con una predisposición a desarrollar una sicopatía, aunque no todos (de esos cinco) van a llegar a cometer un crimen atroz como los ocurridos en los últimos días”. Los asesinatos de Mayerly y Anakin podrían responder entonces a una conducta sicópata despertada por ciertas circunstancias sociales, aunque, según el profesional, existen “inclinaciones psicopáticas inmodificables en ciertos casos”.
Correo del Sur puntualiza que en el país la violencia es cotidiana. Feminicidios, infanticidios, muertes por razones culturales, eliminación de adversarios políticos y otro tipo de crímenes rodean el día a día de los bolivianos. “… en semejante caldo de cultivo, no es de extrañar que los índices de criminalidad suban, que los feminicidios continúen aumentando y que los asesinatos sean cada vez más abyectos. Alguien —el Estado, sus instituciones— tiene que frenar esta locura”, exige el texto de opinión.
Red UNO – Violencia contra el padre de una niña flagelada
Pero si de violencia cotidiana en el país se habla, la dirigida contra niños y niñas es especialmente repudiable y en el municipio cochabambino de Vinto se quiso sancionar un hecho de violencia con más violencia. La red UNO informó este viernes que mujeres de Vinto, aterradas por el flagelo que soportó una niña de un año y ocho meses de parte de su madrastra y la hermana de ésta durante meses, agredieron físicamente al padre de la menor por no haber cuidado a la pequeña. El progenitor trabajaba en La Paz y enviaba dinero para la alimentación y la atención de la niña.
“No pudiste defender a tu hijita, porque no la cuidaste ¡carajo! (… ) Por qué no cuidaste a tu hijita, tenías que protegerla (…) La abandonaste, por tu culpa la maltrataron, la golpearon y tú sin pena (…)”, le gritaron las mujeres mientras golpeaban al padre de la niña con 140 días de impedimento por fracturas en la clavícula, antebrazo, pierna, costillas y nariz. La madrastra y la tía política de la pequeña víctima fueron detenidas por la Policía y enfrentan un proceso penal por intento de infanticidio.