156 millones de electores brasileños vieron a Lula y Bolsonaro en dos rounds, ahora deben elegir Presidente
Este domingo votarán en un país partido literalmente por la mitad.
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En dos ocasiones, la última este viernes en la noche, los espectadores-votantes vieron los duelos televisivos de Lula da Silva y Jair Bolsonaro deseosos de entender a quién apoyarán con su voto este domingo, cuando 156 millones de brasileños habilitados para votar se vuelquen nuevamente a las urnas y los indecisos, que no se acercan al 10%, inclinen la balanza.
La campaña electoral en general, pero sobre todo este último tramo, con Lula y Bolsonaro corriendo parejos en la segunda vuelta ha dividido literalmente a Brasil en dos por primera vez en su historia contemporánea.
Transmitido por la principal cadena de televisión brasileña, Globo, ambos los adversarios se presentaron anoche ante millones de brasileños pegados a sus pantallas como dos personajes arquetípicos que habían llegado, cada uno con sus propias ideas, para salvar a Brasil, informó el diario digital Infobae.
Lula quiso encarnar el papel del pacificador, del que devolverá la paz y el amor incluso entre los partidos en un país “desgarrado por el odio”, como ha repetido a menudo en esta campaña electoral.
Bolsonaro, en cambio, se ha postulado como el patriota, el presidente que proclama Dios, patria y familia, y que en el último debate ha jugado al todo o nada. Terminado el enfrentamiento con Lula, dijo en una entrevista con Tv Globo que no impugnaría el resultado de las elecciones. “Quien consiga más votos será presidente”, afirmó.
Los últimos sondeos confirman un ajustado resultado en la votación de este domingo con el riesgo de que prooduzcan sorpresas. Según la encuesta de Datafolha, publicada el jueves, Lula tendría el 53% de los votos válidos y Bolsonaro el 47%, mientras que los indecisos y votos en blanco o nulos representarían el 7%.
El sondeo Modalmais/Futura publicado unas horas antes del inicio del debate daba a Bolsonaro el 50,3% de los votos válidos y a Lula el 49,7%, con cerca de un 6% de indecisos o de votos en blanco y nulos.
Según la campaña de Lula, el debate de Globo fue una oportunidad para convencer a los votantes de participar en el balotaje. La reducción de la abstención puede ser decisiva en un escenario en el que la polarización contra Bolsonaro se ha hecho más intensa en esta segunda vuelta.
En el último debate se trataron los mismo temas que en el primero y los insultos volvieron a ser los protagonistas, con Lula acusando a Bolsonaro de ser un mentiroso. “La gente sabe que usted ha prometido muchas cosas que no ha cumplido”, arremetió y continuó: “Usted ha mentido 6.498 veces”. Bolsonaro dirigiéndose a su contrincante lo acusó a su vez de ser “mentiroso y bandido”.
El voto en Brasil es electrónico por lo que el organismo electoral de la potencia sudamericana garantizó que los resultados de la segunda vuelta se conocerán este mismo domingo y se sabrá si Lula da Silva accede a un tercer mandato o si Bolsonaro gana la reelección y reasume el 1 de enero de 2023.