García Linera plantea que Morales y Arce se unan por el proceso de cambio “bajo liderazgo indígena”
Menciona a Evo Morales, Andrónico Rodríguez, David Choquehuanca.
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El ex vicepresidente Álvaro García Linera está en un esfuerzo interno por reunificar al masismo, un esfuerzo que tiene su correlato en lo mediático. Ha iniciado una ronda de entrevistas con medios nacionales y extranjeros en la que argumenta su planteamiento de que el evismo y el arcismo acaben con la guerra interna para garantizarle al denominado proceso de cambio perspectiva después de 2025.
“Es necesario que los dos grandes líderes se unan en la perspectiva de dar al proceso de cambio, un nuevo aliento, bajo liderazgo indígena. Hay problemas secundarios que hay que abordarlos y observar, pero no entrar a esta guerra de desangramiento interno y creo que hay un bajo nivel de análisis político”, dijo en entrevista con la red Bolivisión.
“Está Evo (Morales), está el compañero Andrónico (Rodríguez), el compañero David (Choquehuanca), están otros jóvenes indígenas (…), está la nueva generación de profesionales aymaras, quechuas (…). Hay toda una cartera enorme de liderazgos indígenas que hay que potenciarlos, ahí está el nuevo presidente”, agregó.
García Linera consideró que el Pacto de Unidad, en acuerdo con “el líder Evo y el líder Luis Arce, presidente”, debería definir cuáles serán los nuevos indígenas o antiguos indígenas que van a seguir conduciendo el “proceso”.
De todas maneras, afirmó que tiene “un apego muy especial” por Morales, pero que “quisiera ver a otro Evo”. “Usted sabe que yo tengo un apego muy especial por el compañero Evo Morales, pero quisiera ver a otro Evo, otra vez de mirada más nacional y menos localista como está ahora”, dijo García Linera al ser consultado por Bolivisión si tenía en mente a su candidato favorito rumbo a las elecciones generales de 2025.
García Linera descartó postularse en los próximos comicios. “Álvaro no se ve (nuevamente) en el Gobierno. Es tiempo, es el momento de las rebeliones, yo soy un hombre de construir el Estado, la economía, junto con la gente, el Estado de movilización; yo soy un hombre de 2003, de 2005, de 2008, ese es mi tiempo. El tiempo de la administración del destino del Estado no es mi tiempo, eso es de otra gente más capacitada”, señaló.
García Linera indicó que la división política en el masismo todavía no llegó a ser una división social. “Eso es bueno, pero no hay que jugar con ello”, alertó.
Añadió que en esta división “cada cual cree que no necesita al otro”; sin embargo, en su criterio, separados ninguno rebasará el 30% de los votos. Añadió que “el expresidente Evo tiene un núcleo muy duro de lo popular, de lo indígena, que no llega al 50%, pero es un núcleo duro sin en el cual nadie gana en Bolivia”.
