Arce acusa en la ONU a cívicos, opositores, organismos, policías, militares, medios e Iglesia del “golpe”
El Presidente participó en la Asamblea General de las Naciones Unidas, en Nueva York.
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El presidente Luis Arce acusó, en su discurso ante la Asamblea de las Naciones Unidas (ONU), a los comités cívicos, políticos de oposición, la Organización de Estados Americanos (OEA), la Unión Europea (UE), la Iglesia y los medios de comunicación, por el supuesto “golpe de Estado” de 2019, informó el diario Los Tiempos.
Arce emitió su discurso en el marco del 76 período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) que se realiza en la ciudad de New York, Estados Unidos.
“La ruptura del orden constitucional en mi país tuvo la participación de actores nacionales, políticos que en las urnas no cuentan con el respaldo del pueblo, malos efectivos de la Policía y las Fuerzas Armadas, comités cívicos la jerarquía de la Iglesia católica y medios de comunicación hegemónicos. Pero también contó con la participación de la OEA, a través de su secretario General Luis Almagro, también otros gobiernos de la región como el anterior de Argentina, del propio representante de la Unión Europea y otras organizaciones de origen internacional”, afirmó en el pleno del organismo mundial.
Arce aseguró que “se recuperó al democracia” y que se trabaja en la estabilización del país.
Arce también propuso avanzar en acuerdos con los organismos financieros multilaterales para el refinanciamiento o el alivio de la deuda externa a nivel global y apoyar políticas sociales para poblaciones en situación de vulnerabilidad.
“El Estado Plurinacional de Bolivia propone avanzar en acuerdos con los organismos financieros multilaterales para el refinanciamiento o el alivio de la deuda externa a nivel global y para apoyar políticas sociales para poblaciones en situación de vulnerabilidad desde un enfoque de desarrollo integral y sostenible”, indicó.
El presidente también pidió que el acceso a las vacunas contra el COVID-19 sea declarado como un derecho humano, además de la liberación de las patentes para su producción, con el fin de garantizar que lleguen a todos los países del mundo.
“El acceso a la vacuna debe ser considerado como un derecho humano (…). Las transnacionales productoras de medicamentos liberen las patentes y compartan sus conocimientos y tecnología para la producción de vacunas contra el COVID-19 y que, mediante un trabajo conjunto, garanticemos el acceso inmediato a todas las personas en todos los países del mundo”, manifestó en el pleno del evento del organismo internacional.