Récord mundial de casos por ómicron: la media de contagios es de casi un millón por día
Las cifras se dispararon en todos los continentes y preocupan a la OMS.
Escucha la noticia
La pandemia de Covid-19 se ha disparado con un récord de casos en el mundo en los últimos siete días debido a ómicron, una variante altamente contagiosa que representa un riesgo “muy elevado”, según la Organización Mundial de la Salud.
Con 935.863 nuevos casos al día de media en la última semana, según un recuento de la AFP efectuado a partir de balances oficiales, el virus circula actualmente a una velocidad sin precedentes, difundió El Deber en su edición digital.
Esta cifra es significativamente superior al récord anterior, alcanzado entre el 23 y el 29 de abril, con 817.000 casos diarios, y representa un incremento del 37% en comparación con la semana anterior.
“El riesgo global relacionado con la nueva variante ómicron permanece muy elevado”, alertó la OMS en su informe epidemiológico semanal, señalando que su crecimiento requiere “un periodo de dos a tres días para duplicarse”.
La mayoría de nuevas infecciones se han contabilizado en Europa, donde varios países registraron nuevos máximos históricos el martes.
En Francia fueron más de 180.000 casos, en Reino Unido unos 130.000, en España cerca de 100.000 y en Grecia el doble de casos diarios que el lunes.
El repunte de infecciones alcanzó a América Latina y el Caribe, donde la epidemia parecía estar en retroceso hasta hace poco tiempo. Ahora los contagios crecen en la región, que acumula más de 47 millones de infecciones y cerca de 1,6 millones de muertes.
Este incremento coincide con reportes de aumento de la variante ómicron en Panamá, Colombia, Chile, Argentina, Brasil, Paraguay, Venezuela, México, Cuba y Ecuador.
Por ejemplo, en Argentina, los casos se multiplicaron por seis desde inicios de mes y el martes se registraron 33.902 nuevos positivos, diez mil más que en la víspera.
Los países de la región tratan de blindarse a base de vacunas, pero también con restricciones. Brasil canceló en casi todas las capitales estatales las celebraciones de Año Nuevo y lo mismo hizo la alcaldía de la Ciudad de México.