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No cabe duda que el futuro está marcado por un cambio cada vez más acelerado y disruptivo, no por nada en su teoría evolutiva Charles Darwin sostuvo que, “La supervivencia está dada por la adaptabilidad al cambio” y en ese sentido, la creatividad e innovación son atributos indispensables para ello, aunque no necesariamente correlacionados con la formación, en términos generales a mejor preparación mayor probabilidad de crear e innovar.
En un repaso rápido de memoria en relación a las grandes innovaciones se podrían citar demasiadas, inclusive desde la prehistoria haciendo fuego frotando piedras, o la revolución industrial, el automóvil, la energía eléctrica, internet, etc. hasta las modernas plataformas de comunicación o entretenimiento como Chat GPT o Thread.
La principal característica que acompaña de manera más acentuada a las innovaciones del siglo XXI es que tienen un alto grado de rentabilidad y por consiguiente de generación de riqueza, pero con un detalle no menor, con un nivel reducido de inversión en activos duros (terrenos, maquinarias, edificios, etc.) y también con menor relación inversión/trabajador, lo que hace que la rentabilidad sobre activos (ROA) o la rentabilidad sobre puestos de trabajo (ROL) sea atractivamente seductora para los inversionistas y ello se ve en el creciente valor de sus acciones. De hecho, hoy 18-abr-2024 el valor de la acción de Meta ha superado los $us500.- el importe más alto desde jul-2021 ($us380.-) y tomando en cuenta la caída en picada hasta los $us90 en sep-2022
Pero para que esto sea una realidad, las innovaciones tienen que tener un componente de valor diferencial para el cliente de tal suerte que, la demanda de dichos bienes crezca considerablemente al punto que las suscripciones se democraticen y se tenga una rentabilidad tanto por niveles de acceso como por preferencias específicas. De hecho, analizando cuánto demoraron en conseguir un millón de suscriptores las diferentes plataformas nos daremos cuenta del porqué valen lo que valen, así por ejemplo: Netflix 3.5 años, Twitrer 2 años, Facebook 10 meses, Spotify cinco meses, Chat GPT cinco días y Thread 90 minutos.
Estos crecimientos vertiginosos solo se explican a partir de un concepto de Steve Jobs en el sentido que, “La gente no sabe lo que quiere hasta que se lo enseñas” o dicho de otra manera, una frase que se le atribuye a Henry Ford es que “Si hubiera preguntado al mercado, haya fabricado carrozas más grandes” Entonces, mucho cuidado con tener centrada la confianza en los años de experiencia y en conocer al mercado, pues los ejemplos son más que evidentes, aunque por supuesto no es lo mismo que el mercado posible sea el planeta mismo a que sea un determinado segmento de un mercado específico. Lo evidente es que la adaptación al cambio es lo que determinará la supervivencia y no hay que perder de vista que hace mucho tiempo las distancias se redujeron convirtiendo al mundo en un pañuelo.
¿La situación económica está afectando? Hay dos caminos, llorar o fabricar pañuelos, entonces hay que enfocarse en los insumos para hacer pañuelos, no en comprar menos productos por los que hoy se llora debido a su baja rotación o margen en picada y no hay que olvidar que las liquidaciones de stock son al flujo de caja lo que la adrenalina al paciente en shock, ¿y si aun así no volvieran los signos vitales?
Por analogía, ¿qué entendemos por pañuelos? A la manera resiliente de hacer que las cosas sucedan, agregando valor para adaptarse a las necesidades, presupuesto, gustos o preferencias del cliente, pudiendo estar presente en cualquier proceso interno, desde el cambio de la oferta de productos, sus presentaciones, la manera de comunicar, la logística de distribución, el canal de ventas, la segmentación, el acceso a facilidades de compra, etc. Analizar siempre la dualidad PEST-PCR será un buen inicio para fabricar pañuelos, porque hasta los pañuelos son diferentes para cada ocasión, que valga la analogía.
¿En qué lado se encuentra? ¿En los que lloran o en los que van a fabricar pañuelos?, y lo más importante ¿A qué precio venderá el pañuelo? puesto que –parafraseando a Alejandro Ruelas Gosi– “Si el mercado define el precio, no se está inventando nada”. Cuando Henry Ford fabricó los autos –los pañuelos de aquella época– ¿Cuál fue el precio relativo de sus autos respecto las carrosas?
