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Silva es gerente de cooperación, sostenibilidad e innovación de CAINCO, con más de 20 años de experiencia en la promoción de la competitividad y el desarrollo sostenible a través del sector privado.
“Será la primera vez que aquí se toque esta temática en un evento. Los emprendimientos de gran potencial de crecimiento, las startups, han tenido una evolución, por eso es importante también hablar de los mecanismos de inversión. Tiene que haber una industria de capital especializado para que se desarrolle aún más el ecosistema de startups”, señaló.
El experto dijo que el ecosistema en Bolivia “está en pleno desarrollo, es joven, y necesitamos trabajar en todos los frentes. Este evento tiene componentes de educación o formativos, trayendo 12 fondos de inversión de América Latina, con panelistas que contarán su experiencia. Traemos también startups de diversos sectores, que han pasado por este proceso de prepararse para levantar capital y han trabajado con estos fondos. Vamos a tener los dos lados de la moneda: saber qué busca un fondo a la hora de invertir y qué tiene que hacer una startup para poder recibir este financiamiento”.
“Ha habido una transición muy interesante. Antes teníamos actores que trataban de hacer todo, pero el desarrollo de startups puede plantearse como una cadena productiva: empieza con las ideas que después se formulan como negocios, los modelos de negocios entran en un proceso de incubación donde se van afinando, salen al mercado y empiezan a tener ventas o tracción, si tienen potencial de escalamiento entran en la aceleración, ahí se ve si las startups están listas para levantar capital y poder escalar, y finalmente viene la industria de inversión. Poco a poco ha empezado a haber una organización, una maduración del ecosistema. Hay un momento de startups que son más innovadoras que 7 años atrás, con un conocimiento mayor de todo el camino que tienen que recorrer, listas para encontrarse con estos fondos de inversión”, precisó.
Silva indicó que las startups han empezado a emplear de mejor forma la tecnología, el desarrollo de aplicaciones y el uso de software para brindar servicios: “están tocando puertas diversas y levantando un capital ángel, de personas que creen en la idea, que ponen recursos y acompañan al emprendedor con una mirada de mentores o aliados, ayudando a salvar ese periodo que se llama el valle de la muerte, cuando se requiere capital antes de que hayan ventas”.
“Luego vienen los fondos más estructurados, que hacen una evaluación de los emprendimientos desde el punto de vista legal y financiero. No hay historial sino potencial de ventas y del equipo emprendedor. Los fundadores deben tener ciertas características para que el emprendimiento llegue a una escala pocas veces vista en una empresa tradicional”, señaló.
El gerente de cooperación de CAINCO dijo que el capital de inversión para startups “es un capital paciente, espera el tiempo para madurar. Luego vendrá una inversión más grande a comprar su participación. El fondo recupera la inversión más la plusvalía y sigue invirtiendo en otros proyectos”.
“Con financiamiento del BID Lab venimos apoyando a todo el ecosistema en estos últimos tres años, a través de concursos, transfiriendo metodología de incubación a universidades, coordinando con otras aceleradoras y con eventos como el que estamos organizando, para generar una cultura de inversión en una etapa temprana. A partir de ahora, vamos a concentrarnos fuertemente en la aceleración, en tener startups listas para la inversión. También en una mayor vinculación de las startups con empresas medianas y grandes, para que contagien su espíritu de agilidad e innovación”, comentó.
Silva añadió que el foro se desarrollará el 17 y 18 de agosto en CAINCO, de manera presencial, con paneles de fintech, tecnologías para el agro y espacios de networking, entre otros.
