Del 21-F al 10-N: la vitalidad del referéndum, la valentía de Amparo Carvajal y las confesiones de Morales y García Linera
Resumen de los editoriales de Los Tiempos, El Deber y Página Siete
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Importancia y vitalidad del 21-F – Los Tiempos
Este martes, el periódico de Cochabamba aborda la gesta democrática de hace seis años desde una perspectiva histórica. Recuerda que para las elecciones generales de 2014, Evo Morales logró del servil Tribunal Constitucional una interpretación de la aplicación de la Constitución Política aprobada en 2009 en cuanto a los mandatos presidenciales, asegurándose un tercer período de gobierno. El 21 de febrero de 2016 intentó una cuarta postulación, mediante un referéndum constitucional, que rechazó la pretensión prorroguista de Morales, añade el editorial de Los Tiempos.
Siguiendo el repaso histórico, recuerda que en lugar de retirarse tras sus tres mandatos, Morales insistió en el afán de perpetuarse en el poder como lo han hecho, según Los Tiempos, Daniel Ortega en Nicaragua y Juan Orlando Hernández en Honduras, hoy detenido en espera de su extradición a Estados Unidos por narcotráfico. “… gestionó una nueva sentencia del obsecuente TCP, que concluía que la reelección de Morales era un derecho humano y logró así habilitarse como candidato en 2019”, provocando una crisis política y social cuyas consecuencias las seguimos viviendo.
Sin embargo, reseña Los Tiempos, la Corte Interamericana de Derechos Humanos, mediante una opinión consultiva, determinó que la reelección indefinida de los gobernantes no es ningún derecho humano. De ahí que, según el editorial, el 21-F es trascendental porque no solo expresó un rechazo contundente a líderes populistas como Morales que se creen imprescindibles y tratan de forzar su perpetuación en el poder a costa de la Constitución y las leyes, sino que sepultó cualquier pretensión de uso arbitrario del poder.
Amparo Carvajal, símbolo de la valentía – El Deber
La perspectiva escogida por el diario cruceño para referirse a los seis años del 21-F es el análisis del rol de Amparo Carvajal y su eterna lucha por la democracia. Su editorial de este jueves comienza por recordar el ataque “grosero, salvaje y bárbaro” de grupos de choque del masismo contra activistas del 21-F en la plaza Abaroa, entre ellos la Presidenta de la Asamblea de Derechos Humanos, como ocurrió la semana pasada en las puertas del penal de Miraflores cuando un juez decidió que la expresidenta Jeanine Áñez sea atendida en un hospital.
“En el caso de la agresión a Amparo Carvajal, los grupos de choque masistas ni siquiera se inmutaron por la condición de una mujer que tiene 82 años, que tiene dificultad para caminar y tiene que hacerlo con ayuda de un bastón y la asistencia de una persona en quien apoyarse”, afirma El Deber y cuestiona la carga machista en las agresiones de los movilizados pagados y la indiferencia y complicidad de la Policía con los violentos. “¿Ese es el extremo de servilismo de la Policía Nacional de Bolivia que es incapaz de hacer nada cuando se trata de manifestantes del MAS?”, pregunta.
“Con lo que no contaban los grupos violentos del MAS es que se encontrarían con una mujer auténticamente valiente, de reconocida vocación democrática y de defensa de los desprotegidos”, afirma El Deber con tono de orgullo calificando a Amparo Carvajal como el símbolo del derecho a disentir, de pelear por la democracia y los derechos humanos. “El país tiene en ella a una boliviana que no se rinde. Mirarla es admirarla y observar que en medio de tanta oscuridad, con ella asoma la esperanza”, finaliza el editorial del periódico de Santa Cruz.
Libros oficialistas contra la retórica del golpe – Página Siete
El periódico de La Paz analiza el derrumbe de la narrativa del golpe de Estado, consecuencia directa del intento delictivo de Evo Morales de perpetuarse en el poder pese al resultado del 21-F, haciendo hincapié en los contenidos de dos libros oficialistas que curiosamente derrumban la retórica masista: uno es el recientemente presentado “Evo: operación retorno” del escritor Alfredo Serrano Mancilla y el otro que titula “Volveremos y seremos millones”, cuyo autor es el propio Evo Morales.
En el primer texto se publica una entrevista al exvicepresidente Álvaro García Linera que lanza el siguiente dato revelador. “… le comunicó a la expresidenta argentina Cristina Fernández, a las 10:00 del 10 de noviembre de 2019, que todo ya estaba decidido y que Morales renunciaría. El Alto Mando Militar sugirió la renuncia de Morales a las 15:48 y el expresidente dimitió desde el Chapare a las 16:50”. En el libro de su autoría, Morales cuenta que “el domingo después de reuniones, debates, yo tenía otra reunión en la zona del trópico de Cochabamba. Pero con Álvaro hablamos así. Para evitar tanta agresión, tanta humillación. Para que no sigan quemando las casas, como la de mi hermana, las de los familiares. Decidimos: Vamos a renunciar para evitar tantos hechos de sangre”.
Para el editorial de Página Siete los testimonios de Morales y de García Linera son las mayores evidencias de que no hubo golpe de Estado. Pero si hubiera dudas, recuerda que la crónica del periodista Raúl Peñaranda titulada “La revolución de las pititas” narra que el exministro Manuel Canelas y la expresidenta del Senado Adriana Salvatierra se reunieron con dos emisarios de Carlos Mesa pasado el mediodía del 10-N y les comunicaron que Morales había decidido renunciar. “Quien quiera oír que oiga, quien quiera leer que lea, pero los jueces que juzgan a Jeanine Añez y a los militares están obligados a hacer justicia con los hechos y no con el dictado oficialista como está ocurriendo actualmente”, concluye Página Siete.
