Argentina elimina a Países Bajos en tiros penales, con el Dibu Martínez agigantado, y el martes jugará la primera semifinal contra Croacia
Argentinos y neerlandeses jugaron un gran partido en Qatar.
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Argentina es la única selección sudamericana que se instala en semifinales del Mundial de Qatar. Este viernes en la tarde empató 2-2 con Países Bajos el duelo de cuartos de final en tiempo reglamentario y en el alargue. En los tiros penales, los argentinos vencieron por 4-3 y el delantero Lautaro Martínez le dio el pase a la siguiente instancia de una emocionante Copa del Mundo.
Argentina que ganaba cómodamente 2-0, se vio con el partido empatado tras la remontada de Países Bajos, con un equipo desorganizado por los cambios dispuestos por el técnico Lionel Scaloni, pero apareció la figura del portero Emiliano Martínez que tapó los dos primeros penales de Países Bajos y se convirtió en el héroe de los sudamericanos.
Molina, lateral del Atlético de Madrid abrió el marcador tras aprovechar un pase fantástico de Messi. A los 70 minutos se cometió una falta contra el otro lateral Acuña en el área grande de Países Bajos que fue sancionada como penal. El 10 se preparó, respiró hondo y convirtió con un remate cruzado que dejó parado al portero neerlandés.
Los argentinos intentaron asegurar el resultado el resto del encuentro realizando cambios en defensa y reuniendo a casi todos su jugadores cerca de su arco. Con un ataque por la derecha y un centro al punto del penal, donde Weghorst saltó más que nadie, giró el cuello y remató de cabeza a los 83 minutos al palo contrario de Martínez.
Luego, el propio Weghorst, que aguardaba el balón tras la barrera, en un tiro libre cobrado por los neerlandeses, recibió, giró su cuerpo y volvió a batir a Martínez. La clasificación se definía en la tanda de penales.
El martes la albiceleste jugará la primera semifinal de la Copa del Mundo frente a Croacia que este viernes despachó a Brasil en un partido que terminó empatado 1-1 en tiempo regular y suplementario, y venció 4-2 en tiros penales.
Argentina resolvió con inteligencia el partido. Atacó por los costados buscando a Julián Álvarez y cuando lo hizo por el eje central de la cancha, descargó la responsabilidad en Messi y los otros mediocampistas como De Paul y Enzo Fernández. Y cuando le toco defenderse, lo hizo con una línea de cinco que cerró todos los espacios a los atacantes neerlandeses.
